Fondos europeos: el momento de la digitalización

En julio llega la aprobación del plan nacional para el reparto de los fondos Next Generation. Un 33% de las inversiones de destinarán a la digitalización, por encima de la media europea, pero prácticamente la totalidad de los 72.000 millones de euros permitirán vertebrar digitalmente España.

Noelle Cajigas, socia responsable de Mercados & Capital Markets de KPMG en España, fue invitada por el Digital Enterprise Show (DES) a explicar en funcionamiento de los fondos a los inversores, start-ups y compañías innovadoras presentes en este evento internacional sobre transformación digital.

En junio de 2020, cuando se discutía ya en el seno de la Unión Europea un ambicioso plan de recuperación, KPMG en España hizo un trabajo preliminar con clientes, sectores y asociaciones empresariales en búsqueda de inspiración y proyectos de futuro en donde invertir y cuyas conclusiones se presentaron al Gobierno el verano pasado.

Se recogieron propuestas que suponían inversiones por valor de 200.000 millones de euros, explicó Noelle Cajigas, lo que da idea de que en España estaban sentadas las bases para aprovechar el plan, así como del nivel de energía y creatividad que hay en nuestra economía.

“Desde que el Consejo llegó en julio de 2020 al acuerdo que dio lugar al programa Next Generation EU, hemos estado trabajando con muchos clientes”, señaló, para asesorarles en todo el proceso y que estén preparados para cuando se movilice el dinero. Ese acompañamiento permitirá a las compañías estar en la línea de salida en cuanto, en cuestión de semanas, empiecen a ejecutarse las inversiones.

“La idea de los fondos europeos es transformar la economía. Hacia un modelo más sostenible y moderno en donde la digitalización haya calado de forma transversal en todos los sectores”
Noelle Cajigas
Socia responsable de Mercados de KPMG

“Es ahora cuando todo esto empieza. En julio estarán aprobados los planes nacionales y a partir de ahí cada país dispone de tres años para gastar el dinero. El 60% de los fondos tienen que estar comprometidos antes de diciembre de 2022”, recordó Noelle Cajigas.

De ahí la importancia de que los proyectos estén identificados lo antes posible y estemos en un momento crítico para ese 45% de las empresas españolas que han mostrado interés en participar en algún proyecto, según reveló un informe de KPMG y de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). “El tiempo es muy relevante y el momento es ahora”, subrayó la socia de KPMG.

La filosofía del reparto no tiene tanto que ver con inyecciones directas de dinero, como en el pasado, como en la búsqueda de la transformación de la economía hacia un modelo verde y digital y la colaboración pública-privada, tanto a través de licitaciones como de modelos como los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación (PERTE).

“Para hacer sólidas todas esas inversiones y asegurar que la economía salga adelante hay que reformar, producir un cambio”, subrayó la experta de KPMG. “No solo se trata de cuánto dinero vas a gastar o en qué vas a gastar, sino qué reformas estructurales y qué impacto pretendes” con cada inversión.

La especificidad de España: más digitalización

La Unión Europea recomendó en las líneas generales de Next Generation que se invirtiera al menos un 20% de los fondos en digitalización. En España, la digitalización atraerá el 33% de las inversiones. Una transformación digital de las empresas que impulsará la economía digital. Pero la digitalización se extiende transversalmente a través de todos los planes presentados a Bruselas en torno a 10 políticas palanca y 30 líneas de actuación.

“Todos los proyectos están conectados de una manera u otra con la digitalización y la tecnología. La digitalización es un eje transversal”, afirmó Noelle Cajigas en el DES 2021. Europa dibujó un marco común, pero dejó libertad a los estados para adaptarlo a sus circunstancias nacionales. En España los fondos se articulan en torno a cuatro conceptos: transición ecológica, transformación digital, igualdad de género y cohesión social y territorial.

En cualquiera de ello encontramos una huella digital, explicó la socia de KPMG. La cohesión territorial está relacionada con la colectividad. O la igualdad de género, por ejemplo, está relacionada con el empoderamiento digital de las mujeres y su acceso a las carreras STEM. La formación en habilidades digitales de los estudiantes y trabajadores o la reforma de la formación profesional está en el corazón de las reformas sugeridas específicamente a España por la UE. La cohesión territorial, resaltó Noelle Cajigas, está vinculada con la conectividad.

La socia responsable de Mercados de KPMG enumeró solo algunos ejemplos de las posibilidades que se abren a start-ups y compañías innovadoras como las presentes en el DES para poner en marcha estos fondos, bien a través de los PERTE o de las licitaciones que irán publicándose en los próximos meses: desde la agenda rural a la modernización de la administración o la llamada blue economy en torno al uso eficiente de los recursos marinos, tan relevantes en uno de los países europeos con más costa y con mayor flota pesquera.

España, la gran beneficiada

El Digital Enterprise Show (DES) se hizo eco a través de KPMG de los fondos Next Generation de la UE que permitirá a España a acceder a 140.000 millones de euros para relanzar la economía y de los que 72.000 millones llegarán a fondo perdido entre 2021 y 2023.

Tras la intervención de Noelle Cajigas, un participante en este evento sobre la transformación digital preguntó a la experta de KPMG por qué un inversor tendría que confiar en España y no en otro país para invertir en proyectos que pudieran beneficiarse de los fondos, dado que regarán a toda la economía europea.

“Efectivamente es un programa europeo. Pero la cantidad de dinero que se da a cada país no es proporcional a su tamaño. Es el caso de España: representamos el 10% del PIB de la UE y nos van a llegar el 20% de los fondos”, ejemplificó Noelle Cajigas.

En España, además, se da la circunstancia de que se ha decidido ir más allá de las recomendaciones europeas “con un énfasis especial en la digitalización”, lo que hace el plan español único.