Cómo creces importa
Vencer a la incertidumbre y apostar por la diversificación, el ESG o nuevas formas de financiación como claves del crecimiento
Optimismo a pesar de la incertidumbre. El récord histórico de liquidez anima el mercado y ofrece un horizonte de crecimiento, junto a la inyección de los fondos europeos, a las empresas españolas. Marcas como Cosentino, Aristocrazy, Osborne y GMV, reunidas en torno a la serie de encuentros ‘Horizonte 2030: creando juntos un nuevo futuro’, recuerdan cómo han superado el periodo extremadamente retador que trajo consigo la COVID-19 y las oportunidades que se presentan en el mercado y cómo aprovecharlas, pero también de retos como el impulso de la digitalización.
Liquidez para renovar a largo plazo la estructura de capital
Es un momento de oportunidad que empezó el año pasado, y que continúa pese a las incertidumbres que acechan por un entorno geopolítico marcado por el conflicto de Ucrania. El optimismo se inició tras el levantamiento de las restricciones, al que se sumó la elevada liquidez del mercado, lo que ha provocado una actividad sostenida de M&A como no se había visto hasta el momento. Y aunque los cambios son constantes y la mirada debe permanecer atenta ante la innegable sensación de incertidumbre, lo cierto es que el apetito por cerrar operaciones sigue siendo muy elevado. Pero ¿a qué se debe concretamente este auge de las fusiones y adquisiciones (M&A)? Noelle Cajigas, socia responsable de Deal Advisory y de Fondos Europeos de KPMG en España, citó varios factores:
- La abundancia de liquidez, animada por unos tipos de interés hasta ahora muy favorables y un coste de financiación en un mínimo histórico a pesar de los repuntes recientes
- Los fondos de Private Equity han movilizado capital a unos niveles que nunca se habían visto.
- La expectativa de crecimiento con una intensidad muy superior a anteriores ciclos. La necesidad de transformación que viven las empresas en su camino a la digitalización y la sostenibilidad.
El mejor y el peor de los tiempos
“Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos”. La paradoja con la que comienza ‘Historia de dos ciudades’ le sirvió a Santiago Alfonso, vicepresidente de Comunicación Estratégica y Reputación Corporativa de Cosentino, para describir una era sumida en la incertidumbre, pero que también ofrece un horizonte de inmensa oportunidad. “La primavera de la esperanza y el invierno de la desesperación”, como continuaba Charles Dickens en su novela.
Una oportunidad que se materializa en los nuevos hábitos que ha engendrado la pandemia. “Tras el confinamiento hemos redescubierto el hogar como refugio, la importancia del ámbito de lo doméstico. Merece la pena invertir en entornos de confort”, explicó el directivo de Cosentino.
La diversificación geográfica y sectorial, así como los esfuerzos en digitalizarse, han sido imprescindibles para poder superar la pandemia y afrontar el futuro
Pero de nuevo topamos con la paradoja oportunidad / incertidumbre: en el caso del sector de la construcción y la rehabilitación, los problemas de suministro de materias primas y la parálisis de los contenedores ensombrecen esta coyuntura tan favorable.
Ángeles Caballero, la periodista que modera estas conversaciones, aludió a una cierta sensación de carpe diem, a un “vamos a lanzarnos, es el momento”. Y es que, como sostuvo Juan Suárez, cofundador de Aristocrazy, ahora mismo hay dinero en la caja y “hay prisa por empezar a moverlo”.
La diversificación geográfica y sectorial como clave de resiliencia
Si algo está caracterizando este periodo de disrupciones es la resiliencia de las empresas españolas. Buena parte de este éxito ha estado en los deberes hechos antes de la pandemia, empezando por la digitalización. Pero si en algo coincidieron los ponentes fue en la relevancia de la diversificación sectorial y geográfica del tejido empresarial español.
Es el caso del sector agroalimentario: se mantuvieron las exportaciones y se garantizó el abastecimiento de la población. Se ha sufrido, sobre todo, por la crisis del turismo, como recordó Adela Lario, directora de la Secretaría General de Osborne y Gobierno Corporativo, pero factores como la agilidad en la gestión, la rapidez en la toma de decisiones y la mejora en la eficiencia operativa han permitido a su empresa no solo sobrevivir sino también registrar resultados por encima de las previsiones. “Vemos el futuro con optimismo”, señaló la directiva.
La fuerte presencia internacional del grupo, unida a la diversificación en la tipología de negocios, nos ha dado nuevas oportunidades, subrayó Adela Lario.
El talento es uno de los factores sin el cual no se podría hablar de crecimiento
Cuando el talento también se convierte en un activo escaso
En la misma línea se manifestó el grupo tecnológico GMV, para quien la clave en la superación de dificultades responde a dos factores: la diversificación, tanto sectorial como geográfica, y a un elevado grado de implantación digital. “Eso nos ha permitido que el impacto haya sido menor”, sostuvo su director de Desarrollo Corporativo, Marketing y Comunicación, Pedro Schoch. Incluso en el actual entorno,no necesitan tanto consumo eléctrico como otras industrias ni dependen del suministro de materias primas.
Entonces, ¿cuál es el problema que más preocupa al sector tecnológico? “El impacto principal es el talento. Hemos estado creciendo en estos dos años de crisis y lo haremos en dos dígitos el año que viene. Pero ahora mismo tenemos un 17% de puestos de trabajo abiertos en nuestra empresa”, advirtió Schoch. Uno de los nuevos factores de atracción de talento es la posibilidad de teletrabajar y la cultura laboral, porque las primeras preguntas que formulan los candidatos se refieren a cómo se organiza el trabajo en remoto o la filosofía del trabajo en equipo.
Juan Suárez incidió en dar respuesta a este nuevo enfoque laboral de las nuevas generaciones. El reto es “hacer relativamente ‘sexis’ las compañías. No se trata de una tarjeta, un móvil o un traje: es tener las oficinas de Google”.
Recoger los frutos de todo ese tiempo que tuvimos para pensar
De hecho, Juan Suárez, la nueva generación de la familia Suárez, apuntó a tres factores que favorecieron la recuperación en el caso de su grupo empresarial: el acceso al crédito, la transformación digital y la particular capacidad de resiliencia del mundo del lujo.
Pero el principal aprendizaje es más filosófico que operativo. La pandemia y el confinamiento han sido una fuente de inquietud, pero también nos ha abierto los ojos y nos ha regalado tiempo para pensar en el futuro.
“Las empresas familiares necesitan grandes crisis para buscar oportunidades en el mercado”, explicó Suárez, quien defendió la búsqueda de soluciones en la asociación con otros operadores. “Las crisis generan esa creatividad que en grandes momentos de bonanza nos guardamos en el cajón”, subrayó el cofundador de Aristocrazy.
Coincidió con él Noelle Cajigas: “esta época de reflexión nos ha dado la oportunidad de pensar. Esas ideas que teníamos en la cabeza pero que quizás retrasábamos el llevarlas a cabo, ahora vemos que hay que ir por ellas de forma decidida. Quizá esta realidad explique en parte también el alto volumen de adquisidores que estamos observando”.
Adela Lario, de Osborne, estructuró en tres dimensiones este efecto pandemia: “Ha dinamizado el qué hacer (los planes de negocio), el cómo hacerlo (la digitalización y el teletrabajo, por ejemplo) y el cuándo hacerlo (se han anticipado decisiones que se pensaban para más largo plazo)”.
Fondos europeos: una nueva era de colaboración entre empresas
Son la gran oportunidad para transformar la economía española y acelerar los procesos de digitalización y sostenibilidad. Durante la sesión se mostró preocupación ante la excesiva burocracia y la dificultad de acceso por parte de las pymes. Para Noelle Cajigas, las pymes van a salir reforzadas, aunque esto no implique que aumenten de tamaño.
Pasado un año desde su puesta en marcha, estos son los dos grandes logros de los fondos europeos:
- Amentar la conectividad en el tejido empresarial español. La propia idea del PERTE ha obligado a pensar en plural y a trabajar en plataformas. “A la pyme a lo mejor no le va a cambiar el tamaño, pero sí la asociación”, explicó Noelle Cajigas.
- Actuar de factor acelerador para ámbitos estratégicos como la movilidad, la transición energética, la rehabilitación de edificios o el mundo agroalimentario.
Pasado un año tras su puesta en marcha, los fondos europeos han conseguido aumentar la conectividad en el tejido empresarial
En una cara de la moneda se encuentran las empresas de fuerte componente tecnológico, como GMV, que ya ha presentado proyectos de IA en los sectores agroalimentario y sanitario, de computación cuántica y para la movilidad sostenible. “Estos proyectos han hecho que salgas de tu sector a buscar interlocutores. Y a las compañías eso les da una nueva perspectiva, igual que cuando sales de tu región”, sostuvo Pedro Schoch, quien coincidió con la visión de Noelle Cajigas.
También Osborne y Cosentino tienen ya proyectos tramitados y ven los fondos europeos como una oportunidad para fomentar la colaboración entre empresas y con las administraciones públicas. Aunque Santiago Alfonso advirtió del peligro de que se haya generado excesiva expectación y pueda haber muchas empresas, sobre todo pymes, que se sientan superadas por la dificultad técnica del procedimiento.
“Debemos centrarnos en lo que de verdad importa. Los fondos Next Generation EU no deben ser un Bienvenido Mr. Marshall. Debemos estar preparados, no sea que el coche pase de largo y no se pare”, advirtió el vicepresidente de la empresa almeriense.
Los fondos, pese a sus evidentes beneficios directos, presentan problemas prácticos, según varios de los intervinientes. “Los tiempos de las empresas no coinciden con el tiempo de los fondos”, recordó Adela Lario. Es difícil acompasar los proyectos de inversión con los momentos en que salen las convocatorias.
Más pesimista se mostró Juan Suárez, para quien los fondos europeos “ni van a llegar a tiempo ni van a solucionar nada para la pyme, porque la burocracia es demasiado compleja”, apostilló.
Los criterios ESG que impulsan tanto la inversión como la financiación
Los criterios ESG están ya presentes tanto en las decisiones de inversión como en la financiación. Se ha universalizado el proceso de due dilligence en materia de ESG, hasta el punto de que ya hay muy pocas operaciones de inversión que prescindan de este proceso, similar al que se hacía en materia financiera, fiscal o laboral. “Los inversores, antes de entrar en una empresa, quieren saber el nivel de cumplimiento de esa empresa con el paradigma ESG”, explicó Noelle Cajigas.
Este nuevo paradigma se extiende a las licitaciones y a los modelos de financiación. “Hay un peso creciente de estructuras ligadas al cumplimiento de las ambiciones ESG del emisor”, subrayó la socia de KPMG. Estructuras en donde el emisor se compromete a invertir la totalidad de los fondos en proyectos sostenibles o cuyo cupón está vinculado a un objetivo concreto ESG.
No es un objetivo teórico. En Estados Unidos se han multiplicado los litigios debido a que los stakeholders vigilan estrechamente el cumplimiento de estos criterios y penalizan a quien oculta información o no cumple con ellos, advirtió Noelle Cajigas.
Pero la industria tiene la percepción de que en esta materia hay cierta desigualdad geográfica y sectorial en el tratamiento de los inversores hacia las compañías. De que no se compite en terreno neutral y que a algunos países y sectores les exigen más, así como que los factores de medición son todavía un problema al carecerse de estándares compartidos por todos. A lo que se comentó que las empresas eligen unos indicadores, pero podrían optar por otros. “Pero los inversores no te comparan con otras compañías, sino que lo que buscan es que tú mejores. Si tú avanzas, el inversor ya ha hecho algo, ha contribuido a ese reto global”, contestó Noelle Cajigas.
Acompañamiento y Marca España: dos factores indiscutibles de crecimiento
Una de las fortalezas españolas ante la crisis ha sido la diversificación geográfica de su tejido empresarial. Pero esta apuesta estratégica no se trata de internacionalizarse de cualquier manera, como coincidieron varios participantes. Alfonso Santiago puso como ejemplo el proceso de “internacionalización de marca” emprendido por Cosentino.
Si hace años era impensable que una empresa en un pueblecito pudiera salir al exterior sin recurrir a las fases clásicas que empezaban por encontrar un distribuidor local, el cambio de mentalidad de las pymes para crecer pasa por dejarse acompañar, según señaló Noelle Cajigas. “Tenemos la suerte en España de que en el mundo del Private Equity hay muchísimos fondos especializados en pequeña empresa. Son un gran agente facilitador del aumento de envergadura de la empresa nacional”. Por eso, apuntó la socia responsable de Deal Advisory de KPMG en España, “las pymes deben perder el miedo a un socio financiero que se va a sentar a su lado y les va a ayudar a tomar las decisiones correctas”.
En ese sentido, la empresa española tiene ante sí un gran reto: repensar su estructura de capital. Tener el balance preparado para seguir creciendo y aprovechar esa oportunidad, ese momento histórico de liquidez en el mercado del que hablaba Noelle Cajigas.
Pedro Schoch reclamó que la Marca España se apoye en nuevos atributos y no solo en los tradicionalmente asociados a nuestro país. Como nuestra capacidad tecnológica y de innovación. Él mismo destacó que aún observa en algunos interlocutores extranjeros un mohín cuando una empresa tecnológica como GMV se presenta como española.
Mucho trabajo por hacer. Y es que “es más fácil derribar un imperio que una percepción”, como apuntó la moderadora, Ángeles Caballero, parafraseando la cita de Albert Einstein sobre los átomos y los prejuicios.
Cada semana, podrás descubrir una figura, que te llevará a nuevas respuestas. Porque en ‘Horizonte 2030: creando juntos un nuevo futuro’ buscamos trazar las líneas de todo lo que está por venir en los próximos años y por eso nos propusimos construirlo de verdad. Esa es la razón de ser de cada una de las figuras que representan los encuentros. Figuras diseñadas e impresas en filamento 3D biodegradable.