Un año del SII: un paso más hacia la digitalización de las empresas

Este año, realmente 15 meses, de funcionamiento del SII ha llegado con unos resultados de su implementación muy por encima de lo que ninguno, y yo el primero, hubiésemos apostado. Si atendemos a las últimas cifras hechas públicas por la Agencia Tributaria más del 90 de las empresas y contribuyentes sujetos al IVA están cumpliendo de manera efectiva con el SII, porcentaje que se encontraba en torno al 98% si no tenemos en consideración las entidades exentas del IVA.

¿Qué suponen estas cifras? En primer lugar, establece una forma de colaboración entre la Administración y las empresas y sus asesores que ha mostrado cual ha de ser el camino a la hora de establecer cualquier otra medida normativa de este tipo. El establecimiento de un cambio de este calado de forma unilateral y sin contar tanto en su desarrollo normativo como en su implementación con esta colaboración no hubiera llevado a cifras de cumplimiento como las conseguidas. Este camino de colaboración es necesario que se siga andando en las restantes medidas que se aprueben dese la administración.

En segundo lugar, ha supuesto que la práctica totalidad de las grandes empresas españolas, si se permite la pequeña licencia de redondear un poco al alza los datos, han parametrizado y digitalizado todas y cada una de sus operaciones, tanto de facturas recibidas como emitidas, todas sus relaciones con clientes y proveedores, eso sí, desde una perspectiva del cumplimiento del IVA.

Es el primer año del SII pero realmente lo que ha supuesto es el primer paso en el proceso de digitalización de la función fiscal de las empresas. Estas han pasado de contar con una información documental, en papel o no estructurada de sus relaciones con clientes y proveedores a tener esa información perfectamente alineada con sus ERPs y sistemas internos, totalmente informatizada y estructurada.

Este paso está suponiendo ya una modificación en la relación con la Agencia tributaria pero lo realmente trascedente es que es un cambio sobre el que las empresas podrán rediseñar sus sistemas de información fiscal. Contar con una información sistematizada y validada es el primer paso en ese proceso de digitalización de las empresas, pero en ese proceso de transformar la función fiscal de las empresas debemos estar dispuestos a ayudarles y asistirles con todo el apoyo y experiencia tanto jurídica como técnica que una empresa como KPMG puede proporcionarles.

Un primer año del SII, pero sólo un primer paso en la digitalización de los procesos digitales de las empresas.